La nueva directiva de FEMI que es presidida por el médico floridense Daniel Ayala, ha tomado la iniciativa de realizar recorridas por el interior para conocer las realidades de las instituciones de salud y además dialogar con los médicos para conocer sus propuestas y necesidades más urgentes.
Ayala, quien estuvo reunido con referentes de la salud pública y privada en Soriano, mantuvo anoche un encuentro con integrantes de GRE.ME.SO., institución presidida por la Dra. Joselina Ibarburu.
“Desde hace algunos años estamos intentando acercarnos a la realidad de cada rincón del país hablando con los protagonistas buscando saber cuáles son las demandas más urgentes.
Sabemos que el interior tiene problemas para lograr la radicación de nuevos profesionales y allí encontramos que uno de los factores es el económico, pero la realidad es mucho más compleja. Al norte del Río Negro esa situación se agudiza y estamos convencidos que la radicación de los recursos humanos en el interior tiene que ver con la formación de los mismos en el lugar. Hay experiencias como los internados y las residencias que son provechosas y eso significa en determinado punto de la carrera, que el futuro médico toma contacto con una comunidad generando vínculos desde lo afectivo, que lo hace en muchos casos afincarse en el lugar.
Algo muy valioso es también lo desarrollado en la Universidad del norte en Paysandú y Salto. Allí en la actualidad hay 800 estudiantes de Medicina y un gran porcentaje de estos quedará en esos departamentos o zonas vecinas, por lo que desde FEMI somos impulsores de que ello siga ocurriendo. Creemos que la única manera de que los recursos puedan afincarse en esos lugares, es que estos no pierdan vínculo con la academia y tengan las condiciones para desarrollar la profesión de manera digna, tanto en su trabajo como en la parte de remuneración.
Sabemos que en Soriano como en otros departamentos, algunos llamados de ASSE como por ejemplo salud mental que son cargos de alta dedicación, quedan vacantes a pesar que hay una muy buena remuneración y allí vemos que todo este tema es mucho más complicado, requiere de una política a desarrollarse a largo plazo donde tienen que estar involucrados diferentes actores a fin de organizarlos en el presente y en el futuro.
GRE.ME.SO. conjuntamente con FEMI ha desarrollado previo a la pandemia interesantes charlas y encuentros en esa búsqueda de la capacitación médica continua, procuramos impulsar estas propuestas, GRE.ME.SO. en ese aspecto es un ejemplo y desde la Federación tenemos el desarrollo de varios cursos, pero además creemos que debemos generar esos espacios desde la propia Universidad, desde la Facultad, no sólo para los cursos de actualización, sino también para la formación del recurso en diferentes lugares del interior. Debemos buscar que aquellos médicos que están trabajando en Soriano puedan especializarse, seguir un posgrado y desde su lugar ser apoyados con la guía de la Facultad y periódicamente un docente puede llegar hasta el interior, porque en definitiva no son lugares tan lejanos”.
¿Cómo se ve desde FEMI la instalación en Dolores de un centro de Médica Uruguaya?
“Como Federación Médica del Interior somos un gremio que está conformado por aquellos profesionales que residen en los diferentes departamentos. No estamos en contra de instituciones que se afincan en el interior, que en definitiva sean una fuente de trabajo. El tema es que a veces algunas de esas instituciones tienen un desarrollo muy parcial y a nosotros no nos reconocen como gremio. Muchas veces vemos que estas instituciones, en su mayoría traen médicos de Montevideo y el usuario en definitiva, se debe trasladar a la capital para recibir diferentes servicios, lo que no es conveniente”.